Humildad es ser Consciente de que Todo pertenece a Dios |
Dícese que más vale prevenir que curar, y así es, sin duda alguna. Llevando a la práctica las Virtudes del Corazón, las Virtudes del Amor, en nuestra vida diaria, nos podemos proteger en gran medida de ciertas energías negativas como por ejemplo las envidias, los celos, el rencor, el odio, realmente las podemos evitar.
Usando, por ejemplo, la Discreción, que para mi si que es una virtud, evitaremos envidias innecesarias, deseos negativos de otras personas hacia nuestros planes futuros o presentes, o quizás también hacia esas metas que ya hemos alcanzado y de las que estamos disfrutando. El alardeo, la vanidad, el orgullo no es pedestal alguno sino una escalera por la que podemos bajar rodando. La persona segura de sí misma no necesita alardear de sus triunfos ni restregárselos en la cara a aquellos que no han conseguido tales logros. Jesucristo decía: "Que tu mano izquierda no se entere de lo que haga tu derecha", expresión de máxima discreción.
Ser Prudente es de Inteligentes y no de Cobardes |
La Prudencia también es una buena virtud que llevándola a la práctica nos puede evitar daños grabes. Alguna vez escribí: "Pisa firme, mira donde pisas, mira el camino, mira el final del camino". No decidas a "lo loco", de forma impetuosa, eufórica o histérica. Decide solo cuando estés en calma y hayas sopesado los "plus y los contras" de forma lógica, cuerda, profunda. No te dejes llevar por aquellos que te desean vender el "cochino en el saco", futuros inciertos, grandes fortunas sin que muevas un dedo, de seguro te querrán engañar.
La Templanza evitará que pierdas el control y te ensañes en luchas, que, aunque creas que son solo físicas, son más energéticas que físicas. Las peleas, las discusiones, pueden llevar a las partes involucrada a que se envíen energías negativas entre sí como lo pudieran ser el rencor, el odio, la rabia, que con fuerza suficiente puede causar más daño que la peor de las brujerías.
Vivir Justamente es vivir con Prudencia y Humildad ante la Creación |
No juzgues tampoco. No tomes parte alguna y nunca perderás. Jesucristo decía: "Mi Reino no es de este mundo", que tú Reino tampoco lo sea. Vivir justamente evita causar daño a nadie, aunque sea de forma inconsciente. Piensa que si alguien siente que lo has tratado de forma injusta te enviará de todo menos buenos deseos. Tampoco juzgues a nadie porque no eres referencia perfecta para tal menester, que juzgue Dios. Déjalo en manos de Dios y te evitarás mucho "mal sabor de boca". Dios dice que vivamos justamente, y no que juzguemos.
Ante lo dicho, la humildad, el sosiego, la aceptación, la justicia, aunque solo sea de forma exterior, se puede utilizar no por cobardía o miedo, sino de forma inteligente. Existe un dicho que dice: "Dios pone todo en su sitio tarde o temprano", o este otro "permite que Dios luche tus batallas", y el que más me gusta, una cita bíblica: "Más vale perro vivo que león muerto".
Aprende a protegerte, se inteligente.
Damián Alvarez
30 Años Sanando y Educando al Mundo