Que nadie esté de acuerdo contigo no significa que tu no tengas la razón

Era Amor

martes, 29 de enero de 2019

Ansiedad, Angustia y Depresión

La Ansiedad NO es Depresión y se Trata Fácilmente con Sanación

Aunque la Psicología, la Psiquiatría, y hasta la Medicina de Escuela (que se atreve, aunque no esté capacitada, a diagnosticar "depresiones" y recetar ansiolíticos), asocian los síntomas de ansiedad y angustia a una depresión.

Según estos señores bien/mal educados sobre el tema que tratamos, pues, una depresión profunda sería según el grado de gravedad de la ansiedad y/o angustia padecida por el paciente a tratar, o sea, que si tienes mucha angustia o mucha ansiedad pues tienes una depresión profunda pero si solo tienes angustia o ansiedad a veces, en ciertos momentos, o es solo ligeramente, pues, entonces, tienes una depresión leve.

De todas formas, así tengas una "depresión" profunda o leve te tratan con ansiolíticos y otros fármacos que te inducen a la docilidad, al sueño, a no sentir, a no existir realmente, y te tratan con estas medicinas agresivas, con muchos efectos secundarios grabes y que causan dependencia, sencillamente porque no tienen otras.

Los "Nervios" en la "Boca del Estómago son Debidos a Ansiedad
La Ansiedad la Causan los Bloqueos en el Plexo Solar

Para ilustrar rápidamente a la Medicina de Escuela, Psicología y Psiquiatría puedo decir, sin riesgo a equivocarme, que así como tiene dos palabras, la angustia y la ansiedad se deben a causas diferentes, y ninguna medicina existente hoy en día cura, sana, esas causas, esa raíz:

La ansiedad es lo que popularmente se denomina "nervios en la boca del estómago", y su causa son los bloqueos en el Plexo Solar del que la padece. Estos bloqueos generalmente son debidos a traumas.
También acentuar, que se oye mucho a personas ya mayores decir "yo siempre he tenido nervios en la boca del estómago", "tengo la boca del estómago en un puño", "yo siempre he padecido de nervios en el estómago", "a mí, los nervios me atacan siempre al estómago, es que yo soy así", "estoy gorda porque como por ansiedad, es como si me faltara algo en el estómago".
Personas que han vivido toda su vida sin toma alguna de ansiolíticos u otras medicinas para contrarrestar esos "nervios" en la "boca del estómago".

En la "boca del estómago" se encuentra el chakra (centro energético), denominado Plexo Solar, y como hemos dicho son los sustos y los disgustos (traumas), lo que lo bloquean, desequilibran, causando entre otros síntomas ansiedad ("nervios en la boca del estómago").
Así pues, la única manera de tratar esa ansiedad es deshaciendo los bloqueos del Plexo Solar que la causan. Lógica pura y sencilla. Aquí entran los Sanadores, y no las medicinas, ¡por favor!.

La Angustia NO es depresón y se trata Fácilmente con Sanación

La angustia no es lo mismo que la ansiedad, aunque un paciente pueda padecer los dos síntomas, que no enfermedades. La angustia se debe a bloqueos entre el chakra Corazón (otro centro de la anatomía espiritual humana), y el Plexo Solar ya citado.
Los bloqueos si se deben a penas, sobre todo amorosas, pero también al miedo, a no ser aceptados, queridos, a ser abandonados, etc., y puede estar relacionado con una depresión pero también se puede padecer de angustia sin tener depresión alguna.

La angustia es lo que se siente cuando el amor no fluye, camino hacia abajo, hacia el Plexo Solar. Hablamos del amor propio, sí, amor a ti mismo. Esa energía que no fluye se estanca en el pecho causando presión, dificultades respiratorias, arritmias, etc., lo que normalmente se denomina "ataques de pánico angustia", y precisamente, la mayoría de las veces es debida al miedo, pero no es el miedo la causa de la angustia, sino la causa del ataque de pánico angustia. Miedo a padecer un ataque causa el ataque.

Ningún antidepresivo ha podido, puede, ni podrá deshacer nunca los bloqueos que el paciente tenga entre su chakra Corazón y Plexo Solar, eliminando la angustia y haciendo que el anteriormente afectado recupere su amor propio. Aquí es donde entran los Sanadores, y no las medicinas, ¡por favor!




Consigue el Libro "Depresión ¿para qué? ¡Vive la Vida!" (enlace),
de Damián Alvarez